En esta página puede obtener un análisis detallado de una palabra o frase, producido utilizando la mejor tecnología de inteligencia artificial hasta la fecha:
Símil es una figura retórica que utiliza el recurso de la comparación o semejanza entre términos literarios. Su carácter es más simple que el de la metáfora, y por ello aparece con más frecuencia que esta tanto en las epopeyas clásicas como en la poesía popular.[2]
Es una figura literaria que deforma la realidad mediante la exageración. Su apreciación ayuda a reconocer el valor estético.
Ejemplos: •brillante como el oro. •dura como gema de diamante.
Los símiles pueden ser reversibles (disponiendo sucesivamente los dos términos en distinto orden) o graduados (de inferioridad, igualdad o superioridad), así como asociarse a otras figuras (exemplum, alegoría, alusión, antonomasia, etc.)[3]
En la actualidad, los repertorios de figuras literarias no establecen distinción entre el símil y la comparación[4][cita requerida]y se insiste en el uso de elementos de relación como “como”, “cual”, “que” o “se asemeja a” para diferenciar formalmente a esta figura de la metáfora. Pongamos un ejemplo para dejar clara esta diferenciación entre los conceptos símil y metáfora: tus níveas manos son suaves como el terciopelo (símil); tus níveas manos son terciopelo (metáfora).
Con el nombre latino de símiles se designan en retórica los razonamientos que se apoyan en la analogía o relación de semejanza entre los asuntos tratados.[5]